En las entrañas de la Ciudad de México, se esconde una leyenda que ha trascendido el paso del tiempo. La fascinante historia del Puente del Clérigo, un relato lleno de pasión y misterio que ha cautivado a generaciones. Acompáñanos a desentrañar los secretos detrás de este enigmático lugar.
La Tragedia
Los vecinos comentan y algunos mayores afirman que en la antigua Ciudad de México, sobre la calle ahora conocida como la calle del Puente del Clérigo, se desarrolló un drama que dejó una huella imborrable en la historia. Doña Margarita Jáuregui, una joven de belleza sin igual, residía con su tío, el respetable Padre Don Juan de Nava. Esta calle servía como un vínculo entre la Ciudad y la ciudad indígena de Tlatelolco, con un puente que cruzaba una zanja, garantizando la seguridad de los habitantes españoles.
En aquellos tiempos, la corte del Virrey era testigo del amor prohibido entre Doña Margarita y Don Duarte de Sarraza, un noble portugués de prestigio. A pesar de las advertencias del tío de Margarita, el joven noble persistía en su intento por conquistar su corazón, desafiando las convenciones sociales y familiares.
El Crimen
En una noche sombría, la tragedia golpeó el corazón de la Ciudad de México. Mientras Don Duarte expresaba su amor a través de la ventana de Margarita, una oscuridad inesperada se apoderó de él. Al divisar al Padre Don Juan regresando a casa, un impulso oscuro lo llevó a cometer un acto atroz: ese joven malvado fue donde estaba el puente, y cuando el Padre estuvo junto a Don Duarte, se abalanzó sobre él y hundió su daga profundamente en su cráneo. La daga estaba clavada tan firmemente allí, señor, que no pudo sacarla; y así arrojó al sacerdote muerto sobre la pared del puente y al agua con la daga aún clavada en su cráneo; y luego se fue a su casa, desencadenando así una serie de eventos que cambiarían el destino de todos los involucrados.
La Venganza del Más Allá
Tras una prolongada ausencia, Don Duarte regresó con la intención de reunirse con Margarita una vez más. Sin embargo, lo que encontró fue su propio destino sellado por la venganza. Al amanecer, su cuerpo sin vida fue descubierto en el Puente del Clérigo, y sujetándolo firmemente, con una rodilla huesuda en su pecho y dos manos huesudas en su garganta estrangulándolo, había un esqueleto. Y el esqueleto estaba vestido con una sotana negra, como solo los clérigos usan, y en su cráneo estaba clavada firmemente una daga oxidada. Por lo tanto, se hizo generalmente conocido que Don Duarte había asesinado al Padre Don Juan; y que el esqueleto del Padre Don Juan había matado a Don Duarte en justa venganza.
Sea pues este relato un recordatorio de los peligros del amor prohibido y las consecuencias de la traición en la Ciudad de México. Cada vez que camines por estas calles empedradas, recuerda la historia de Don Duarte y el Padre Don Juan, y reflexiona sobre las sombras que acechan en las noches de esta gran ciudad.
A su mercé…
Si este relato fue de su agrado, humildemente pido nos ayude compartiéndola a sus familiares y allegados durante una reunión en una negra noche. O por medio de un compartir en su red social. Si la leyenda atenta a su cultura pues es distinta a la alojada en su memoria, pido a su mercé que sea indulgente pues es así como el relato llego a mis oídos y es mi forma particular de compartirla. Recuerde que por ser leyenda puede o no tener una base real y tener una increíble dosis de libertad literaria ya sea por la región donde fue relatada o por quien la narra.
Hasta la próxima garbancer@s
Basado en la obra de Mr. Thomas A. Janvier
«Legends of the City of Mexico», 1910
#LaGarbancera #LeyendasMexicanas #PuenteDelClérigo #AmorProhibido #Venganza #Misterio